MOSQUEE DU PROPHETE

La Mezquita del Profeta, o masyid al-Nabawi en árabe, data de la Hégira, el año de la fundación del Islam. Pero no es la primera mezquita construida por el Profeta. Se dice que primero se instaló en la mezquita de Quba, que aún existe, a 3 km al sur de Medina. Antes de entrar en Medina, se dice que Mahoma se detuvo en el pueblo de Quba. Se dice que rechazó la hospitalidad de los habitantes y que eligió el lugar exacto donde se detuvo su camello para construir su casa y una mezquita contigua. Sólo después de 20 días en Quba, Mahoma entró en Medina. La ubicación de la mezquita de al-Nabawi estaba determinada por el lugar de la primera oración del viernes. ¿Realidad o leyenda? No importa. La mezquita de al-Nabawi fue efectivamente fundada por el Profeta. Y se convirtió en el modelo de todas las mezquitas: un recinto cuadrado, una galería sombreada y una sala de oración. Durante los primeros ocho años de la Hégira, las oraciones se dirigieron a Jerusalén, hasta que Mahoma regresó a La Meca y declaró la Ka'bah como casa de Dios, convirtiéndola en la ciudad más sagrada del Islam. No queda nada de la mezquita original, que ha sido modificada muchas veces. Sin embargo, una maqueta de la misma está expuesta en el Museo Ithra de Dammam.

La mezquita del Profeta fue remodelada y ampliada por el primer califa Omar ibn al-Jattab, compañero del Profeta. Su tumba se encuentra en la mezquita, junto a la del Profeta. En el año 650, la mezquita fue ampliada de nuevo por el califa Uthman ibn Affan, otro compañero de Mahoma. Los primeros califas quisieron dejar su huella en la madre de todas las mezquitas. El califa omeya Al Walid ibn Abdel Malek tuvo una influencia considerable. Fue él quien ordenó añadir un minarete y cavar un nicho en el muro de la qibla ('dirección'), el mihrab. Se añadieron más de 2.600 metros cuadrados de terreno a la mezquita, que incluye las tumbas de las madres de los primeros creyentes. En la segunda mitad del siglo VIII, la mezquita se amplió y reconstruyó de nuevo. Sin embargo, no fue hasta el siglo XV cuando la mezquita sufrió otros cambios importantes. El sultán mameluco Qaitbay mandó reconstruir el mausoleo del Profeta añadiendo una cúpula sobre la cámara funeraria. En 1813, el sultán otomano Mahmud II mandó cubrir de plomo y pintar de verde la cúpula del mausoleo del Profeta. Hacia 1850, su sucesor mandó arrasar la mezquita y reconstruirla a mayor escala. El único edificio que escapó a su ambición fue la Cámara Profética. Los saudíes también ampliaron la mezquita al aumentar el número de peregrinos. En la actualidad, la mezquita de al-Nabawi ocupa una superficie de 16 hectáreas y puede acoger a 250.000 fieles.

La mezquita actual está construida en dos plantas, con la sala de oración principal en el primer piso. La cubierta plana, con 27 cúpulas, puede acoger a los fieles en días de gran afluencia. La gran explanada situada fuera del recinto de la mezquita también es utilizada por los peregrinos a la hora de la oración. Tanto la explanada como el patio de la mezquita están protegidos del sol por sombrillas retráctiles. La nueva mezquita está bordeada por 6 minaretes. La mezquita de época otomana tiene cuatro minaretes en el centro. La cúpula verde, fácilmente distinguible, marca la ubicación de la tumba del Profeta.