Restaurante con terraza que ofrece helados y bebidas frías y mucha repostería.
Imprescindible en plena rue du Sauvage, la terraza siempre está concurrida cuando hace buen tiempo, con helados y bebidas frías que atraen a las familias y a cualquiera que busque un descanso en sus compras. Con un mostrador bien surtido que da a la calle y una planta de restauración en el primer piso, el Moulin de Poulaillon es un lugar muy concurrido, que ofrece diversos servicios: panadería, catering, restaurante y, sobre todo, la posibilidad de comer o picar algo a cualquier hora y disfrutar de una de las numerosas pastas, una Moricette, un pretzel o un bocadillo a lo largo del día. Hay algo para todos los bolsillos, y las personas con prisa serán atendidas rápidamente durante su pausa para comer. En resumen, entre la oferta de tentempiés, las bandejas de comida y el menú del mediodía, siempre tentador y bien servido, hay algo para satisfacer incluso a los más indecisos y golosos.
Passé le 2 decembre a 7h30
J'ai pris un chocolat chaud chantilly
Celui ci a le gout de l'eau
Mais le tarif d'un vrai chocolat avec du lait a bon entendeur
Bref, totalement surcôté.
Je ne comprends pas l'engouement autour des mauricettes. Cher pour des ingrédients de mauvaise qualité.
Le service n'est pas aimable et l'intérieur de l'établissement vraiment pas terrible.
Quand aux ingrédients, elles élaborée avec des blés 100 % français dans une démarche « clean label » c’est à dire sans aucun additifs ni ingrédients de synthèse...