CASTILLO DE SASAYAMA

Situado en el corazón de la ciudad, el castillo de Sasayama fue encargado en 1609 por Tokugawa Ieyasu, que deseaba continuar su estrategia de construir castillos por toda la ciudad de Ōsaka para rodear y contener el poder de la familia Toyotomi, que controlaba la ciudad. Sasayama era un importante cruce de caminos en el camino hacia el distrito de San-in y 20 señores de 15 provincias se movilizaron para participar en la construcción del castillo, que se completó en menos de un año. Luego se puso bajo el control del hijo de Ieyasu. Habiendo sobrevivido a la era Meiji, durante la cual muchos castillos en Japón fueron destruidos, el Castillo de Sasayama finalmente se quemó en un incendio en 1944. En el año 2000, uno de los edificios fue reconstruido para permitir a los visitantes empaparse de la atmósfera de antaño y descubrir cómo era el castillo antes del incendio. El tour comienza con un video explicativo sobre el castillo, con subtítulos en inglés. Luego llegamos frente a la primera sala de tora no ma, la Sala del Tigre. Una gran pintura, que representaba un tigre, estaba en exhibición allí en ese momento. De hecho, era costumbre exhibir pinturas de animales salvajes a la entrada de las residencias de los señores para mostrar su poder. En cuanto a las pinturas de los apartamentos privados, representaban flores y pájaros para un ambiente más zen, refinado y elegante. También se exhiben trajes de samurái y es posible que los visitantes se los pongan para continuar la visita y ponerse en la piel de un verdadero guerrero de la época. Un poco más adelante, se puede admirar un magnífico biombo, pintado por Kano Korenobu, un gran pintor de la época. La siguiente habitación se llama jyodan no ma, donde el jefe del castillo solía instalarse para recibir a sus súbditos, que se presentaban en la habitación contigua, tsugi no ma. Se puede observar que la primera habitación es más alta que la segunda y su techo es más alto, para subrayar la superioridad del señor. Esta habitación se usaba a menudo para películas y series de televisión. Las obras que se exhiben aquí no son originales, sino que fueron hechas con técnicas del siglo XVII. Terminaremos la visita con kujyaku no ma, el salón del pavo real, usado para la ceremonia del té. Desde la parte trasera del castillo de Sasayama, se puede disfrutar de una vista sin obstáculos de la ciudad y el campo circundante. El pequeño Santuario de Aoyama también está situado dentro de los muros del edificio.