EL NUS DE PEDRA - APPARTEMENTS RURAUX
Cómo llegar y contactar
Una dirección que ofrece pisos rurales con una gran piscina y un delicioso desayuno en Sant Marti.
El Nus de Pedra es un pequeño paraíso que busca la tranquilidad más cerca de la naturaleza. En 2008, tras haber renovado y transformado los antiguos graneros del Mas Roca (cuya construcción data de 1622) en 8 apartamentos rurales, Joan et Montse abrió las puertas de su vivienda familiar a los viajeros de paso. El resultado es suntuoso: los alojamientos están decorados con mucho gusto, disponen de todo lo necesario para ser autónomo (cocina, comedor, cuarto de baño…) y dan al encantador valle de Llemena; el cuerpo principal de la casa y sus bóvedas de piedra albergan una sala de juegos para los niños, un salón de lectura y un gran comedor; y el jardín tiene aires del Eden con su vegetación exuberante y su bonita piscina en la que te apetece pasear en temporada alta. Sus huéspedes, Joan y Montse, en grandes apasionados de senderismo y de su región, están muy atento a sus comensales y estarán encantados de compartir anécdotas y consejos de viaje. Es imposible no mencionar aquí el espléndido desayuno, preparado bajo petición, delicioso y perfectamente indicado para atacar un día caminando. Un lugar cálido y lleno de encanto. Numerosas actividades que se pueden prever desde el Mas.
Compare y reserve su alojamiento en EL NUS DE PEDRA - APPARTEMENTS RURAUX
Opiniones de los miembros sobre EL NUS DE PEDRA - APPARTEMENTS RURAUX
Ens vam enamorar de l'entorn per la seva bellesa, de la Montse, d'en Joan i d'en Nus per la seva hospitalitat i per fer-nos sentir en tot moment com a casa i de l'apartament l'Arbre, preciós i acollidor a parts iguals.
Us recomano 100% escapar-vos-hi i descobrir la Vall del Llèmena.
El problema en nuestro caso fue el propio apartamento "El Celler" que desde nuestro punto de vista es muy mejorable, sobretodo en mantenimiento y limpieza. El problema de la casa es que hay MUCHOS MOSQUITOS, que además viven la mar de bien en una balsa con peces que hay de adorno. Ninguna ventana de la casa tiene una triste mosquitera, ya no solo por los mosquitos... sino que estando en el campo es fácil que entren moscas y otros insectos (matamos varias arañas). Teniendo en cuenta que el alojamiento está pensado para ir en familia, no entiendo como no hay mosquiteras o como mínimo antimosquitos eléctricos en los enchufes (cuando nos quejamos, entonces sí nos dejaron uno). Es algo que viendo la inversión que se ha hecho en la casa, no se entiende como no hay en cada una de las ventanas... O al menos avisar, sabiendo que vamos con un bebé de meses, para ir preparados.
Por otro lado la limpieza del apartamento deja mucho de desear... al haber mosquitos, las paredes están llenas de manchas de mosquitos muertos (con sangre incluida). El sofá estaba realmente sucio, lleno de manchas... que daba cosa sentarse. Sería tan fácil como taparlo con una colcha y en cada cambio de huéspedes, cambiarla y lavarla. El respiradero del baño estaba lleno de suciedad. El dispensador del jabón de manos oxidado (al tocarlo te manchabas de óxido). Algo muy sorprendente cuando una de las cláusula de la casa es que sino lo dejas limpio te cobran la limpieza...
Nos cobraron 8€/noche por una cuna de viaje para el bebé, cuando debería ser un servicio cortesía de la casa (como en casi todas). El armario es de broma (no creo que hiciera más de 1,5m de altura) tiene un colgador en que si cuelgas algo se arruga por debajo porque toca abajo...
En la cocina no hay ni un triste trapo para secarse las manos, y cuando hablan que está equipado con manteles y servilletas, son de papel como los de los bares de menú barato.
El trato bastante seco, cero cercanía... muy acostumbrados a tratar con gente de fuera. Una vez pagado, ni un triste "gracias por venir", "buen viaje"...