CAFÉ DE FLORE
En pleno centro de la capital valona, todo en este café hace honor a su alter ego francés: el nombre del cartel, por supuesto, pero también la decoración (una Marianne, torres Eiffel, fotos, libros...) y la carta con sus cócteles de nombres originales (el Pigalle, el Métropolitain...). El ambiente es relajado, la clientela bastante tranquila, la carta de cervezas variada y bien surtida. Y la música es buena, como decía Goldman, con un gran predominio de canciones francesas que atraen a cuarentones y cincuentones.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre CAFÉ DE FLORE
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
