PENSIÓN LA RĂSCRUCE
Esta pensión, literalmente «en el cruce de caminos», ofrece catorce habitaciones dobles o triples. Son sencillas, cómodas, limpias y agradables. Algunas tienen cuarto de baño privado, mientras que en otras es compartido. El pequeño restaurante del albergue sirve una deliciosa cocina rumana. La especialidad de la casa es el gulasch. No olvide probarlo, sería un pecado. El comedor está decorado en un bonito estilo rústico, con antiguos instrumentos musicales colgados de las paredes. En la sala común encontrará juegos y un televisor. Incluso hay una sauna.
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Opiniones de los miembros sobre PENSIÓN LA RĂSCRUCE
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