HOTEL VILLABLANCA

Enterrado en la vegetación, este hotel fue construido según el modelo colonial: paredes encaladas y baldosas de color marrón rojizo. Esta arquitectura se explica por su pasado como granja lechera gestionada por el ex presidente Rodrigo Carazo. Los bungalows de paredes de ladrillo son muy acogedores: baño, nevera, hervidor eléctrico y chimenea para recordar que las noches pueden ser frescas. Rodeado de una reserva privada de 75 hectáreas, el hotel ofrece una buena mezcla de confort, encanto y descubrimiento de la naturaleza circundante.