Catedral de San José de Tula

Construida a mediados del siglo XVI, la catedral de Tula fue originalmente un convento de la orden franciscana, dedicado al patriarca San José. Fue elevada a la categoría de catedral en 1961. El interior está decorado de forma bastante sobria, con la bóveda de la nave única cubierta de nervios dorados. Es posible asistir a las ceremonias organizadas por las diferentes familias de la provincia, como las quinceañeras, las bodas y las misas.