TRATTORIA AL VICOLO
leer másSe trata de un pequeño y encantador bistró en el que se encontrará con conocedores más que con turistas. Bajamos unos escalones para llegar a la sala abovedada; en las paredes, ollas de cobre y fotos del lago a principios de siglo. Pero la verdadera alma del Vicolo es ella: Lilli. Cuando no está en los fogones, se gira entre las mesas para charlar con los clientes y preguntarles si el pescado está bien asado, o si el vino local es de su gusto. Característico y acogedor, una dirección de la que rara vez se sale decepcionado
LA TORTUGA
leer másJunto al pequeño puerto, este restaurante tiene bien merecida su estrella Michelin. Una vez hechas las presentaciones, el resto es evidente: elección de menús gastronómicos, carne o pescado, raciones pequeñas, aperitivos al principio y servicio refinado. Y sin embargo, La Tortuga no es un restaurante pretencioso. Pocas mesas, colores vivos y una cálida acogida relajan enseguida el ambiente. La gente viene de lejos para sentarse en el bonito comedor de La Tortuga, que se ha convertido en uno de los mejores restaurantes del lago.