PARQUE ARQUEOLÓGICO DEL VALLE DEL CÔA

Probablemente el yacimiento menos conocido del Patrimonio Mundial de la UNESCO en Portugal. Las condiciones de visita no contribuyen realmente a ello. Prácticamente en el fin del mundo, es necesario reservar para visitar los tres yacimientos de arte rupestre abiertos al público. Aquí se encuentran algunos de los más bellos y numerosos grabados rupestres al aire libre de más de 25.000 años de Europa. El yacimiento del valle del Côa fue descubierto en la década de 1990 y tiene una extensión de veinte kilómetros.

Se pueden visitar tres sitios:

La Canada do Inferno. Una visita de dos horas, en todoterreno, seguida de un paseo de aproximadamente un kilómetro, para descubrir grabados del período paleolítico, así como obras grabadas en piedra durante el siglo XVIII. Los primeros grabados, que se descubrieron en 1991 incluyen representaciones de cabras, que se han convertido en el símbolo del parque.

Ribeira de Piscos. Un poco más lejos, la visita continúa con un trayecto de unas tres horas, en todoterreno y luego una caminata de unos dos kilómetros. Un yacimiento muy especial, debido a las escasas representaciones del Paleolítico europeo. Aquí se puede ver una notable figura antropomórfica naturalista.

Penascosa. Un yacimiento cercano a la aldea de Castelo Melhor, más accesible e insertado en un paisaje único, es conocido por sus imágenes representativas del arte rupestre del valle del Côa. Cuenta con una gran cantidad de grabados que son fáciles de interpretar. La visita, que dura noventa minutos en todoterreno, incluye un paseo de unos doscientos metros.