MONUMENT " HEROINAT "

El monumento a las "heroínas" (Memoriali Heroinat, Spomenik Heroine) está dedicado al sacrificio de las mujeres albanokosovares durante la guerra de 1998-1999, especialmente las que fueron víctimas de violaciones. La obra, inaugurada en junio de 2015, fue diseñada por el diseñador albanés Ilir Blakçori. Consta de 20.145 medallones de metal de 3,5 cm de diámetro con el mismo rostro de mujer. Se colocan en varillas de diferentes longitudes. Los medallones están colocados muy juntos para reproducir el mismo rostro de mujer en gran formato (5,5 x 4,5 m) y en relieve (2 m de profundidad). Según el diseñador, los medallones representan a las 20.145 mujeres albanesas de Kosovo violadas por las fuerzas serbias y yugoslavas durante los dieciocho meses de conflicto. El resultado es bello y pone de relieve un tema sensible en una sociedad todavía marcada por la dominación masculina de las mujeres.

Plagio y controversia. Sin embargo, el trabajo plantea varios problemas. En primer lugar, como han señalado los periodistas locales, se trata de un plagio. El proceso de las varillas que dibujan un rostro en relieve fue desarrollado por el diseñador británico Asif Khan para su instalación MegaFaces en el pabellón del operador telefónico ruso Megafon durante los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi en febrero de 2014. En segundo lugar, la cifra de 20.145 es cuestionable. Ninguna de las principales ONG, como Amnistía Internacional o Human Rights Watch, da cifras precisas. Sólo se da una estimación de entre 10.000 y 20.000 violaciones cometidas durante el conflicto. Es imposible conocer el número exacto de víctimas de este tipo de delitos masivos.

Minorías e impunidad. Otro hecho muy preocupante es que la obra ignora todas las demás categorías de víctimas además de las mujeres albanesas. Las ONG informan de un gran número de casos de niños y hombres violados y agredidos sexualmente durante la guerra de Kosovo. También señalan que todas las minorías del país se vieron afectadas, en particular las mujeres serbias y romaníes, que fueron violadas sistemáticamente por miembros del ELK. El último detalle chocante de este monumento, financiado por el Estado kosovar y la ayuda europea, es su ubicación, muy cerca del Ministerio de Justicia kosovar y de las oficinas de la misión europea Eulex encargada de los asuntos de justicia. Desde 1999, ninguno de los hombres sospechosos de violación durante el conflicto ha sido condenado por la justicia nacional o internacional.