LE GRAND CAFÉ
Al morir del fundador del Grand Café, su hijo Malek herta herta de la panadería, del café y de la papelería, mientras que a su hermano se le atribuyó el jabón de Bimbo. El Grand Café es, por tanto, un joven propietario dinámico, acompañado por un tío procedente de Francia, alrededor de los cuales gravitan unos sesenta empleados.
Su terraza y sus desayunos pertenecen a los imprescindibles de Bangui. Aunque el Grand Café es el lugar de encuentro de los ricos Centrafricanos como expatriados o militares franceses -por lo tanto, ideal para ver y ser vistos, sobre todo los domingos por la mañana- no es menos agradable, ritmos por el bullicio de la calle que bordea la terraza aplastada del sol.
El interior, lleno de frescura, es luminoso gracias a los grandes ventanales que rodean los sofás. El principal atractivo del Grand Café reside en sus alegres vidrios, guarniciones de vainilla, panes de chocolate, millehojas… de buena calidad, pasteles y especialidades panaderas. Yogur de fruta fresca (in situ o para llevar), cremas caramelo y galletas dulces son algunas de las especialidades de la casa, al igual que los helados, fabricados in situ, pero cuya ondulación tiene dificultades para convencer. También puedes comer en el pulgar una porción de pizza deliciosa, un bocadillo o una ensalada: ideal para un descanso de mediodía rápido, que escapa al calor del mediodía. Servidores de camisa blanca con nuez mariposa.
Ouvert toute la journée il sert de belle pizza, salades et autres pâtisseries. Service un peu long mais c'est bon et c'est le principal