Los mejores restaurantes Saint-Helier

Aunque se puede pedir pescado o un plato de linguini, el Wild Fire es conocido casi exclusivamente por su impresionante menú de filetes, desde Angus a Chateaubriand, pasando por enormes filetes de ojo de costilla y magníficos ribeyes. ¡Siempre cocinado a la perfección! Si la cuenta puede subir rápidamente, los carnívoros estarán encantados en esta hermosa sala decorada con agradables bancos, una bonita iluminación y trofeos metálicos de diseño colgados en las paredes. Y los consejos del personal, siempre sonriente, son muy acertados.

Esta lujosa brasserie, de aspecto cuidado y elegante, acoge a la alta sociedad de Saint-Hélier en una mansión privada en pleno centro de la capital. Se viene aquí para disfrutar del bar y sus cócteles de alto nivel, o por la carta bien elaborada del restaurante y su cocina siempre deliciosa, como el lenguado fino o el risotto de trufa. Un marco encantador y la promesa de un momento delicioso para dos. Le Banjo también dispone de cuatro habitaciones de lujo. Pregunte en recepción.

Le Soy es uno de los mejores lugares para comer comida japonesa en las Islas del Canal. El chef toma los grandes clásicos de los menús japoneses y les añade unas cuantas inspiraciones bien meditadas, desde cocina fusión hasta buenas ideas de marisco y poke bowls. Por si fuera poco, el entorno es realmente muy agradable, la decoración es siempre de buen gusto y hay una gran terraza (climatizada) para los días agradables en los que no llueve.

El Lookout Beach es una gran opción para comer en la playa a las afueras de St Helier, desde el desayuno a la cena, el té de la tarde o el brunch. Situado en la carretera que lleva a Saint-Lawrence, el menú es sencillo y eficaz, y ofrece marisco, abundantes ensaladas y una buena selección de hamburguesas. También hay opciones vegetarianas, veganas y sin gluten.

El Bond Street Social ocupó el lugar del número 10 en 2023, pero sigue siendo una de las direcciones más de moda de Saint-Hélier. Aquí podrá disfrutar de un menú creativo que cambia con las estaciones y las novedades. Pero hay algo que permanece constante: los productos frescos, en su mayoría locales, y la carta, siempre bien pensada y copiosa. Para un aperitivo o una copa después de cenar, el bar es el lugar ideal. En definitiva, una dirección que no hay que olvidar para pasar una velada de éxito en la capital.