Guía de viaje Zod

La ciudad de Zod, o Zotk, en el extremo sureste del lago, en su parte más llana, es más conocida por sus grandes minas de oro, que preocupan a los ecologistas. Debido a este yacimiento de oro, explotado desde la época soviética y antes, existe una línea de ferrocarril que llega a estos remotos lugares, conectando Zod con Erevan vía Sevan, y que apenas es utilizada por los viajeros. Sin embargo, un desvío a Zod está justificado por los restos de dos iglesias rústicas del siglo XIII en el pueblo. Como alternativa, desde Vardenis se puede tomar la carretera que bordea directamente el lago, pasando por Medz Mazra (un importante emplazamiento de khatchkars de los siglos XV y XVI), al pie del punto más alto de la cordillera de Sevan (el monte Kotchadagh, 3.370 m), en la frontera de Armenia y Azerbaiyán. A partir de ahí, la línea de costa se estrecha y las montañas caen a veces en picado hacia el lago. Es mejor no aventurarse en estas montañas, más allá de las cuales se encuentra Azerbaiyán Además del relieve, el conflicto con el cercano Azerbaiyán explica la baja densidad de población en estas zonas de pastoreo dedicadas a la ganadería. La población rural azerí que habitaba parcialmente estas montañas hasta 1988 tuvo que marcharse, y se desaconseja encarecidamente practicar el senderismo en la zona de los picos de la cordillera de Sevan hasta nuevo aviso. Especialmente desde la derrota armenia en la última guerra de Karabagh en 2020, que permitió a Azerbaiyán recuperar el territorio de Kelbadjar, situado entre Nagorno-Karabagh propiamente dicho y Armenia, que había sido controlado por los armenios desde 1994, trasladó (o reposicionó, como en la época soviética) la frontera armenio-azerí a las puertas de Zod. Por ello, Azerbaiyán, que pretende utilizar su ventaja militar para delimitar, en su propio beneficio, el trazado de esta delicada frontera, que los soldados rusos están llamados a defender junto a los armenios, ha tomado el control de una parte de las instalaciones mineras del yacimiento de oro de Zod, que los armenios explotaban antes de la guerra.