OBSER­VA­TOIRE FRANÇOIS-XAVIER BAGNOUD

El Observatorio François-Xavier Bagnoud es una de esas estructuras de nueva generación que no sólo ofrece una simple divulgación de la astronomía a través de unas pocas noches de observación, sino que va mucho más allá con actividades relacionadas y complementarias. Estas actividades son, en este caso, verdad, muy facilitadas por la ubicación geográfica del observatorio, en las montañas, al pie de las laderas, bajo un cielo de calidad. Además de las observaciones, hay también sesiones de planetario (en el pueblo) y caminatas guiadas por el "Sendero del Planeta". Por las tardes, el visitante aprende a identificarse entre las principales constelaciones, descubre la observación a simple vista, luego pone el ojo en el ocular de un telescopio de gran diámetro, 610 mm, permitiendo ver en directo las atmósferas atormentadas de los planetas, los cráteres de la Luna, los brazos en espiral de algunas galaxias, o sumergirse en el corazón de las nebulosas más bellas. Durante el día, las observaciones del Sol se realizan según dos fórmulas: "Puertas abiertas", la más sencilla y gratuita, en la que el visitante tiene acceso sin previo aviso al observatorio cuando el cielo está despejado (un animador está entonces a su disposición), y "Reserva", que está reservada para grupos de 5 o más personas. Para aquellos que quieren combinar caminata y astronomía, el Planet Path es para ellos.... Comienza en Tignousa, en las alturas de Saint-Luc, a unos cien metros del funicular, bajo el observatorio, donde el Sol se materializa mediante un óvalo que sirve de reloj de sol. La distancia a recorrer es de unos 6,5 km, para un desnivel de 500 m. La escala de distancias es de 1/1.000.000.000.000.000.000.000, lo que significa que un metro de marcha representa en realidad mil millones de metros! Esta caminata dura aproximadamente 2h30, a un ritmo lento, incluyendo descansos en el camino. Pero a una altitud superior a los 2.000 m, hay que evitar bajar la cabeza: hay que comprobar el pronóstico del tiempo y al menos traer ropa de abrigo y otra chaqueta para la lluvia. Cabe señalar que la oficina de turismo de Saint-Luc ofrece diversos materiales prácticos y educativos sobre esta excursión, folletos gratuitos o más completos.