Idealmente situado en el corazón de Zúrich, este bar-restaurante cuenta con una pequeña sala con paneles de madera oscura que antaño estuvo invadida por gremios de estudiantes. Una viga sirve de prueba de admisión: hay que pasar por encima de ella sin derramar el vaso (de cerveza). La sala desprende un ambiente muy cálido, perfecto para degustar algunas de las especialidades: Zürcher schnitzel y rösti, filete de salmón de los Alpes suizos... De postre, sorbete casero y mousse de chocolate para morirse. Servicio agradable. Se recomienda reservar.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre ÖPFELCHAMMER
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
Die kleinen, gemütlichen Gaststuben mit viel Holz versetzen einen in eine längst vergangene Zeit. Das Restaurant ist so einladend und gemütlich, man möchte am liebsten gar nicht mehr gehen.
Als Gast wird man behandelt wie ein König. Freundlich, aufmerksam, authentisch... kurzum gesagt einfach nur sympathisch.
Das Essen passt zum Ambiente. Währschafte Zürcher Küche, schön angerichtet, grosse Portionen und das Züri Gschnätzlets ist definitiv in den Top 3 von Zürich.
Reservation ist dringend empfohlen, ein Besuch in der Oepfelkammer auch :-)