Galerías de arte Cracovia

En el subsuelo de la Fundación Judaica, esta tienda está repleta de porcelanas, libros, pinturas y bibelots diferentes. Un lugar único que huele a formol pero tan único que no se puede pasar al lado.

Inaugurada en 1991 en pleno centro de la ciudad, la galería dirigida por Jan Fejkiel, historiador del arte polaco, lleva más de treinta años exponiendo grabados, dibujos y pinturas contemporáneos. A lo largo de los años, esta sólida experiencia le ha permitido acumular miles de obras de cientos de artistas contemporáneos locales, algunos conocidos, otros desconocidos, y en la actualidad cuenta con la mayor colección de arte gráfico contemporáneo de Polonia. Por supuesto, no todo puede verse in situ, y la galería alquila piezas de todo el país.

Andrzej Mleczko es un satírico político muy querido en Polonia. Sus cáusticos, ingeniosos, irreverentes y a veces blasfemos y sulfurosos dibujos en un colorido estilo infantil se reproducen no sólo en papel, sino también en tazas, camisetas, alfombrillas de ratón, camisas... todo un lío que se puede comprar en la tienda. Incluso sin un conocimiento muy detallado de las sutilezas de la política contemporánea, la puesta en escena del autor es muy divertida.

Ubicada en la antigua casa de oración judía Zucher, en un hermoso edificio neogótico de ladrillo rojo del siglo XIX, es la galería de arte más innovadora de Cracovia y merece una visita. Hay muchos muebles pintados, esculturas, pinturas y fotografías de artistas polacos contemporáneos que no desentonarían en las exposiciones del MOCAK. Por desgracia, algunas de las piezas más aventureras no encajan realmente en la vida cotidiana de un visitante corriente, ni son muy portátiles.

Esta pequeña galería subterránea de Kazimierz, a menudo cubierta de grafitis, puede no parecer gran cosa, pero es el hogar de Leszek Macak, uno de los principales expertos en arte naif de Polonia y propietario de la galería. Encontrará esculturas de madera y pinturas de arte naif polaco. Esta forma de arte, que a menudo se desprecia y se califica de arte menor de pintores sin talento, tiene un fuerte atractivo y vuelve a ponerse de moda para acompañar decoraciones modernas, muy limpias y frías. Los coloridos cuadros que encontrarás aquí no carecen de encanto.

Situada en la primera planta (hay que tocar el timbre para entrar), esta librería-antigüedades ofrece libros, postales, mapas, manuscritos y grabados antiguos. Recorrer las instalaciones es una aventura en sí misma y te sientes como un explorador en un antiguo archivo. Muchos de los productos son únicos y darán cierto caché a los interiores de quienes deseen adquirirlos. La librería está especializada en textos científicos y académicos.