BAR MLECZNY BAMBINO
Restaurante polaco
•
€
Cómo llegar y contactar
+48 22 625 16 95
Soy el propietario
•
Pulse aquí
2024
Recomendado
•
2024
Un bar mleczny como nos gustan a nosotros: un escenario que no ha cambiado desde la época soviética, y lo mismo ocurre con su menú y su servicio frío y expeditivo, que se puede encontrar en todos sus homólogos. De hecho, los bares de leche tienen fama de no ser demasiado exigentes. Al menos se puede comer buena comida auténtica a precios bajísimos (que es de lo que se trata en estos restaurantes financiados por el gobierno). Una dirección de época que es fácil de apreciar, sobre todo una vez que te dan la cuenta.
Publicidad
Publicidad
Organice su viaje con nuestros socios Varsovia – Warszawa
Transporte
Reserve sus billetes de avión
Alquiler de coches
Alquiler de barcos
Alojamiento y estancias
Encontrar un hotel
Alquiler de vacaciones
Encuentra tu camping
Viajes a medida
Viajes de inmersión
Servicios / Presencial
Actividades y visitas
Buscar un médico
Opiniones de los miembros sobre BAR MLECZNY BAMBINO
3/5
3 opinión
Valor para el dinero
Calidad de la cocina
Originalidad
Marco/Ambición
Servicio
Visitado en agosto 2017
Valor para el dinero
Calidad de la cocina
Originalidad
Marco/Ambición
Servicio
Service et originalité à revoir, mais pour le prix et quelque chose à consommer sur le pouce cela fait parfaitement l'affaire
Típico Mleczny polaco (literalmente: Bar de leche), legado de la época soviética (especie de cantina económico).Nada de excepcional en el entorno, ni de la recepción, pero al menos se puede comer una cocina correcta económico que atrae toda la competencia (entre 2 y 3 euros para unas copiosas comidas).
Los mejores en Varsovia – Warszawa y alrededor de
Publicidad
Encuentre ofertas de estancias únicas con nuestros socios
Publicidad
effectivement ici c'est un bar à lait traditionnel comme il y en avait des dizaines il y a bien longtemps, maintenant il n'en reste que quelques uns, nous avons voulu essayer pour notre expérience, délicieux moment devant la carte murale des offres énormes des mets exclusivement en polonais. On fait la queue dès le trottoir avant d'entrer, on choisi ce que l'on veut manger, on commande comme on peut en polonais à la caisse, on paye, on remet le ticket facture au comptoir de la cuisine, on va s'installer à une des tables de la grande salle et on attend que la cuisine vous hèle que votre commande est prête et c'est parti pour manger une cuisine de cantine de l'ancien temps, très simple faite de produits frais, sans présentation, et gouteuse et à des prix défiant toute concurrence, c'est si peu cher que la plupart des habitants du quartier viennent avec des boîtes plastiques ou bouteilles chercher soupes, viandes et légumes (un repas complet entrée, plat, dessert pour 17 PLN (4,10 euros), bon vous en avez pour votre argent ne cherchez pas ici la grande cuisine, c'est de la cantine, belle expérience quand même.