HÔTEL SEELAND ^{* * *}

Un poco apartado, a 3 km del centro de la ciudad, el Seeland es una dirección con encanto. Se trata de una típica posada familiar donde le recibirán a la antigua usanza, a menudo con el traje tradicional austriaco. Las habitaciones son clásicas, luminosas y suficientemente grandes. Se agradece su limpieza, y su estilo vintage de los años 70 no carece de encanto. Y por un precio muy asequible, la casa también ofrece un servicio de restauración de calidad, lo que hace que sea una parada realmente relajante después de una visita turística por los alrededores. Desayuno buffet.