MUSEO ESTATAL DE ARTE ABILKHAN KASTEEV

El Museo de Bellas Artes fue completamente restaurado a principios de la década de 2020 y reabierto en 2024 con motivo del 120 aniversario del nacimiento del pintor kazajo Abilkhan Kasteev (1904-1973), que da nombre al museo. Nacido en Taldykorgan, entre Almatý y el lago Balkash, Kasteev estudió en la antigua capital y no tardó en recibir varios premios. Tras obtener el título de artista nacional, también recibió la Orden de la Revolución de Octubre (la segunda condecoración más importante de la antigua URSS). El museo alberga una vasta colección de su abundante obra. Kasteev pintó decenas de retratos de «hijos de la patria»: el explorador Shoqán Valijánov, el cantante Jambyl Jabayev, el revolucionario Amankeldi Imanov… Pero la importancia de su obra reside sobre todo en la cantidad de cuadros que representan la vida cotidiana del Kazajistán soviético, luego estalinista, ensalzando las riquezas del país y la fuerza del pueblo en un estilo cercano al realismo soviético, pero que sin embargo consigue distinguirse de él. Sala tras sala, seguimos el progreso del talento de Kasteev y sus diferentes períodos, al tiempo que vemos evolucionar la sociedad kazaja bajo el impulso de Moscú. Sedentarización, industrialización, urbanización… A lo largo del camino se desarrolla una película fascinante. En total, Kasteev dejó un legado de más de mil obras, muchas de las cuales se expondrán durante largo tiempo en el museo tras su reapertura.

El Museo de Bellas Artes ha reinstalado tras su repertura su amplia colección de arte contemporáneo ruso y kazajo. En particular, incluye obras radicalmente distintas de las de Kasteev, lienzos prohibidos durante el período soviético y salvados por coleccionistas privados. Se expondrán de forma permanente más de mil cuadros de la vanguardia soviética, en particular los del pintor Serguéi Ivánovich Kalmykov (1891-1967), considerado uno de los principales artistas de este movimiento y que vivió en Almatý desde 1935. También hay una sala dedicada a las artes tradicionales, donde se pueden admirar alfombras, muebles e instrumentos musicales de gran calidad. También se puede contemplar la sala dedicada a las artes orientales (chinas, indias, japonesas, coreanas y tibetanas), aunque las piezas expuestas distan mucho de ser las más atractivas del museo.