EL CENTRO DE ARTESANÍA

Aquí, unos pocos apatams improvisados albergan una corporación de pintores (a menudo niños) que reproducen hábilmente los motivos de los lienzos korhogo en tiras de algodón tejidas en los pueblos de los alrededores: animales y emblemas totémicos de los trajes tradicionales de los bailarines iniciados de Poro y de los hombres pantera, entremezclados con composiciones geométricas. Estos temas figurativos se han enriquecido con el tiempo con motivos populares: Alpha Blondy y Tiken Jah Fakoly en verde-amarillo-rojo, bailarinas, máscaras, etc. Aquí podrá sentarse bajo los apatams forrados con telas de secado, observar a algunos de ellos en acción, pedir a otros que le expliquen las técnicas de elaboración y negociar el que más le guste. También hay puestos de tejedores tradicionales de piezas de algodón locales. Los productos acabados van desde "simples" telas hasta vestidos, túnicas, bolsos, manteles... Los precios son más razonables que en Waraniéné, ya que los vendedores proceden de pueblos no turísticos, pero no hay albornoces, ni colchas tejidas, y menos opciones. El centro, que durante mucho tiempo se limitó a trabajar y vender telas korhogo, cuenta ahora con un pequeño taller de carpintería y ofrece una gama más amplia de artesanía norteña: tallas de madera, cerámica, bronces y joyas, abalorios, e incluso fetiches o chaquetas de cazador senufo, instrumentos musicales: balafones y gbofés, trompetas transversales senufo, arte malinke de Malí o Burkina Faso...