ALOHANOK

Un magnífico café en un hanok que mezcla con gusto la tradición, la casa de la abuela y la moda. La estética es claramente buscada y exitosa. Podríamos pasar horas en este pequeño rincón zen disfrutando de su café con leche. Y para acompañarlo, déjese tentar por una generosa rebanada de pastel de chocolate o un par de macarrones. Incluso puedes disfrutar de las pocas mesas que hay fuera. Por la noche, este encantador café suele estar lleno de gente, por lo que le recomendamos que vaya allí a primera hora de la tarde, cuando está más tranquilo.