Guía de viaje Askri

Después de Tifrit, famosa por sus cascadas y pozas, la carretera serpenteante prosigue su ascenso por auténticos senderos bereberes, ofreciendo una vista soberbia al atardecer de las paredes montañosas que adquieren un color entre rosa y dorado, en un escenario casi irreal del fin del mundo. A continuación se llega a una gran meseta y al pequeño y solitario pueblo de Askri. El pueblo cuenta con una tienda, una gasolinera y una oficina de correos, todo ello en marcado contraste con la naturaleza salvaje original del lugar. Aquí se pueden hacer algunas compras, aunque parezca estar en medio de la nada, y repostar, lo que evita quedarse sin combustible en el desierto.