TEMPLO DEL FUEGO (ATESHKADEH)
Cerca del centro de la ciudad se eleva este pequeño templo zoroastrien donde el fuego le quema constantemente. Encendido a Shiraz hace más de 1.500 años, trasladado a Yazd hacia 1940, su llama nunca se interrumpió. La preciosa combustión, mantenida con madera noble de prunier, está alimentada por un traje (sacerdote zoroastrien), responsable del lugar desde hace casi años. Visitantes como fieles pueden observar el fuego detrás de un cristal, para no contaminar el elemento natural por la respiración. Descubrirás en las paredes algunos pensamientos de Zarathoustra, que preconizan la bondad y la búsqueda de la verdad. El templo alberga un pequeño museo que expone varias publicaciones zoroastrianas y los retratos de los mecenas. En el exterior, dominando la entrada y dominando el edificio, brilla frente al sol el símbolo del zoroastrismo, Farvahar (el hombre pájaro), con azulejos azules y amarillos, reproducción exacta del antiguo motivo achemoide achéménide Ahura Mazda.