TUMBA DE HAFEZ (ARAMGAH-E HAFEZ)
El jardín perfumado, entre naranjos y rocas, da buen paseo en medio de los fuegos y los sarv, estos cipreses de Shiraz. Un poco a la manera de los mausoleos chiítas, los iraníes vienen aquí a recoger la tumba de uno de los más grandes poetas Persans (1324-1389). Ver a los iraníes desenmascarando religiosamente su lápida de mano -con el índice y el principal de acuerdo con el uso-de una oración en voz baja del Corán como recompensa, refleja bien el respeto del conjunto de un pueblo por este hombre de cartas. Algunos se dedican incluso a la bibliomancia. En pie, los ojos cerrados delante de la lápida, emiten un deseo diciendo: ¡Ya Khaje Hafez Shirazi! (Hafez, ayúdame a saber). Abriendo uno de sus libros al azar de las páginas, se impregnan del significado del primer camino. Hafez, originaria de Shiraz, es considerada como el amo del ghazal (poema de amor). El diwan, su obra monumental, es después del Corán, el segundo libro sagrado en Irán. Cada familia, tan humilde, dispone de un ejemplar y todos conocen al menos uno o dos a los extractos del diwan. En primer lugar, una lágrima de alabastro es alta en su memoria, en 1773, bajo el reinado de Karim Khan Zand. Uno de sus poemas más conocidos figura en la estela. En el siglo XX, un mausoleo santificará aún más el lugar. Construido según los planes del arquitecto francés André Godard, su pequeña cúpula esculpida descansa sobre ocho finas columnas, símbolo de una carpa de sol. Su alto techo de tejas vernáculas con motivos delicados alberga la famosa dalla de mármol. Dirígete también a la rosaleja situada detrás del monumento funerario, donde una casa de té tradicional espera a los aficionados al narguigo suave amargo o del hielo al azafrán y al agua de rosa, especialidad de Shiraz. Cossins, estrés y cuenca central ayudarán a los más meditativos a penetrar en uno de los gusanos del gran poeta, que celebra la vida y el deseo con una lirismo incandescente: " Mi amor, como el viento, cuando pasas por mi tumba, en mi fosa, deseo, rompe mi linceul… " Hafez.
C'est avant tout le prétexte pour visiter l'un des plus beaux jardins persans d'Iran. Jardin intimiste ou se mêlent les différentes senteurs orientales et où la rose est omniprésente. Loin du tumulte des grandes artères qui pourtant jouxtent le jardin, il règne en ce lieu une atmosphère paisible.
Pour le prix je voit peut t intérêt.
les iraniens sont plus sensible a ce lieux