STARVED ROCK STATE PARK

A unas dos horas en coche de Chicago, el Parque Estatal de Starved Rock es una de las joyas naturales de Illinois y una escapada ideal para los amantes de las actividades al aire libre. Situado a orillas del río Illinois, este parque estatal cuenta con acantilados de arenisca, profundos cañones excavados en la roca y espectaculares cascadas, especialmente notables en primavera o tras fuertes lluvias.

Con más de 20 km de senderos señalizados, el parque ofrece varias rutas de senderismo a través de bosques, cornisas y desfiladeros. Miradores como Lover's Leap y Eagle Cliff ofrecen impresionantes panorámicas del valle y el río. En invierno, es también uno de los mejores lugares de la región para observar águilas calvas.

El parque toma su nombre de una leyenda de los nativos americanos: en el siglo XVIII, miembros de la tribu de los Illinois se refugiaron en la cima de la roca principal para escapar de un conflicto tribal, donde murieron de hambre, de ahí el nombre de "Starved Rock". También tiene una rica historia: en 1682, el explorador francés René-Robert Cavelier de La Salle mandó construir aquí el Fuerte Saint Louis, que durante un tiempo sirvió de puesto avanzado de la presencia francesa en Norteamérica. Hoy en día, se puede visitar un pequeño emplazamiento conmemorativo en este lugar.

El parque ofrece un camping bien equipado con parcelas para tiendas y caravanas. También hay un albergue histórico con restaurante donde podrá disfrutar del parque sin renunciar a la comodidad. Si ya está harto de la ciudad, ésta es una escapada en plena naturaleza, una rareza en la región.