Famosa por sus montañas, Vancouver es un destino ideal para relajarse, ya que está rodeada de montañas y diversión. La ciudad ofrece un impresionante contraste entre calles antiguas con edificios victorianos y barrios modernos con elegantes galerías de arte . Durante su visita, no se pierda Stanley Park, una joya escondida que ofrece playas, lagos y piscinas de vapor al aire libre. También puede escaparse a los bosques y montañas, donde se sentirá como en el Polo Norte.
Otra actividad memorable es un vuelo en hidroavión sobre Vancouver, que ofrece unas vistas impresionantes y permite llegar a las ciudades vecinas en un abrir y cerrar de ojos. Para degustar la cocina local, diríjase a Robson Street o haga una parada en el mercado de Granville Island. Las actividades familiares son imprescindibles: la Galería de Arte de la UBC, el Acuario y el Jardín Botánico. Para facilitarte el viaje, aquí tienes un itinerario completo para aprovechar al máximo tu estancia en Vancouver
1. Pasea por Stanley Park y el paseo marítimo de Vancouver
Stanley Park es uno de los parques más grandes de Canadá. Te recomendamos que empieces admirando su lago natural y su lago artificial, y luego continúes tu paseo dirigiéndote al puerto deportivo, más conocido como Coal Harbour, para disfrutar de los carriles bici y las pistas de hielo. Si está de vacaciones en familia, diríjase a Brockton Point para ver las réplicas de los tótems, objetos sagrados utilizados por los indígenas, que se encontraron hace años en este parque.
También puedes visitar :
- El Acuario de Vancouver , un centro de investigación situado dentro del parque donde podrás descubrir especies marinas y aprender más sobre su conservación.
- El Jardín de Shakespeare, una experiencia maravillosa, donde se cultivan plantas mencionadas en algunas de las obras más famosas del escritor.
- El Marion Malkin Memorial Bowl Theatre, un teatro al aire libre que ofrece espectáculos de Broadway, proyecciones y conciertos bajo las estrellas.
- Rose Garden, un jardín famoso por sus exhibiciones florales. De junio a septiembre, se exponen docenas de tipos diferentes de rosas.
- Prospect Point, una zona costera desde la que se puede ver el puente canadiense Lion's Gate y el islote de Burrad.
En verano, también podrá disfrutar de sus playas, la mayor de las cuales, Second Beach, cuenta incluso con una piscina climatizada al aire libre. También puede seguir caminando hasta Third Beach o English Bay, esta última la más popular para alquilar kayaks o jugar al vóley-playa.
2. Escapada a la isla de Granville
Granville Island es un lugar mágico situado a quince minutos del centro de Vancouver. Esta antigua fábrica se transformó en un centro de arte en los años 70, y encontrarás entretenimiento para toda la familia.
Te recomendamos una visita al Mercado de la Isla Granville de Vancouver, que funciona desde 1979. El ambiente es festivo, con música callejera, puestos de comida, arte y artesanía. Si planeas un viaje en familia, puedes hacer una parada en el Mercado Infantil, con su gran variedad de tiendas de juguetes y golosinas.
Y no se pierda la Local Brewery, la mayor fábrica de cerveza de Canadá, que ofrece visitas guiadas y degustaciones.
3. Asistir a un partido de los Vancouver Canucks
Asistir aun partido de los Vancouver Canucks es una actividad imprescindible en Vancouver. Estos partidos de hockey suelen celebrarse en el Rogers Arena. El ambiente es muy festivo, verás a los aficionados con las caras pintadas con los colores del equipo, y podrás vivir algunos de los actos especiales que se organizan para celebrar las victorias o apoyar al equipo.
Para conseguir entradas para ver a los Vancouver Canucks al mejor precio, es aconsejable comprarlas con antelación. La temporada va de octubre a abril, y los partidos son muy populares y se retransmiten en la mayoría de las plazas y bares de la ciudad. Así que planifica tu viaje en torno a este periodo para no perderte ninguno de los partidos.
4. Visita el Acuario de Vancouver
Situado en Stanley Park, el Acuario de Vancouver es una atracción imprescindible para toda la familia. Es unainstitución de renombre mundial para la conservación de la vida marina . En su interior encontrarás zonas de rehabilitación, áreas de conservación de especies en peligroy un hábitat seguro para más de 50.000 animales.
Si va con niños, le recomendamos que visite la zona de los pingüinos, así como la sala Clownfish Cove, donde los más pequeños podrán disfrutar de juegos interactivos y demostraciones. En la exposición de la Zona Tropical podrá ver tortugas asiáticas, corales y caballitos de mar, así como especies del Caribe, África y Centroamérica.
La entrada cuesta unos 25 euros para adultos, 15 euros para niños y adolescentes y es gratuita para menores de 3 años.
El acuario también cuenta con otras zonas temáticas, como :
- Steller Bay , donde se pueden ver leones marinos que han sido retirados de su bahía original debido a la extinción masiva de las manadas de la zona.
- Arctic Canada, donde podrá ver una beluga, una popular especie del Ártico.
- Graham Amazonia, una reconstrucción de los ecosistemas y especies del Amazonas.
- Treasures of the British Columbia Coast, donde encontrará especies canadienses raras y preciosas que viven en el mar, como la gallineta nórdica o el hagfish púrpura.
- La Costa Salvaje, una zona con instalaciones al aire libre, donde podrá ver leones marinos, nutrias marinas, focas y delfines.
- Pacific Canada Pavilion , el mejor lugar para ver todo tipo de peces.
- Frogs Forever, donde se pueden ver 22 especies de ranas y sapos, que están protegidas porque están en peligro en su hábitat nativo.
5. Haz una excursión a Whistler desde Vancouver
Para cambiar de aires, nada comouna excursión al Polo Norte de Canadá: a hora y media en coche de Vancouver, Whistler es un lugar ideal para disfrutar de atracciones invernales como esquí, snowboard y trineo. Whistler fue sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2010 (aún se pueden ver los aros olímpicos)
Si quieres organizar una excursión a Whistler desde Vancouver, hay opciones guiadas desde unos 138 euros. Estas son algunas de las actividades más populares de las que puedes disfrutar:
- Telesilla : una forma estupenda de ver Whistler y Vancouver desde las alturas, que puede usarse en verano o en invierno.
- Tirolina: si quiere sentir la adrenalina recorriendo su cuerpo, nada mejor que lanzarse por una de las tirolinas más altas de América. El recorrido suele partir de Blackcomb Mountain a velocidades de hasta 100 kilómetros por hora.
- Hacer unrecorrido en hidroavión o helicóptero: puede disfrutar de un recorrido en hidroavión por Vancouver o realizar la experiencia directamente desde Whistler. Este tipo de experiencia cuesta unos 120 euros.
- Senderismo: Whistler ofrece una gran variedad de senderos, rodeados de bosques y cascadas. Hay opciones tanto para principiantes como para expertos, y las rutas más recomendables son Rainbow Falls, High Note Trail y Train Wreck Trail: esta última permite llegar a un vagón de tren abandonado situado cerca de un puente colgante de gran altura.
6. Visitar el Parque del Puente Colgante de Capilano
Esta es una de las principales atracciones de Vancouver: el Parque del Puente Colgante de Capilano, con su famoso puente colgante a 70 metros sobre el río. Para llegar, puedes conducir unos 20 minutos por la BC-1A/BC-99 N o coger el autobús. El sendero ofrece algunas de las mejores vistas de la Columbia Británica, y disfrutará de un entorno boscoso rodeado de flora y fauna. Desde aquí podrá ver el desfiladero de Vancouver y pasear por las pasarelas y plataformas de madera que salvan los acantilados. No te pierdas la visita a "El bosque vivo", una exposición interactiva ideal para conocer mucha información importante sobre el bosque.
La entrada al parque cuesta unos 35 euros, y es recomendable llegar pronto para evitar las colas y las aglomeraciones.
7. Subir a Grouse Mountain
Situada a treinta minutos en coche de Vancouver, Grouse Mountain es una visita obligada si quieres disfrutar de un paseo alpino con vistas panorámicas de la ciudad Puedes llegar en el autobús gratuito de Canada Place, que es una buena opción pero se llena rápidamente.
En invierno, puedes disfrutar de su estación de esquí, así como de exposiciones interactivas sobre aves. En verano, hay conferencias, acceso al hábitat de los osos, paseos en telesilla y espectáculos de leñadores.
También puede practicar senderismo en la nieve o montar en el teleférico Skyride, el más largo de Norteamérica (la entrada al teleférico cuesta unos 65 euros, pero hay pases familiares a partir de 180 euros) Recomendamos comprar entradas para Grouse Mountain, en Vancouver, que cuestan unos 60 euros y suelen incluir el uso del Skyride y el telesilla, acceso a espectáculos en el Theatre in the Sky y acceso a actividades de invierno y verano.
8. Hacer un crucero de avistamiento de ballenas de Vancouver a Victoria
Victoria, la capital de la Columbia Británica, es conocida por sus edificios victorianos y sus actividades al aire libre, como el avistamiento de ballenas. Situada al sur de Vancouver, se tarda unas cuatro horas en llegar en ferry o autobús, pero si toma un hidroavión hasta Victoria, llegará en aproximadamente media hora. Es un viaje impresionante que te lleva sobre el estrecho de Haro, una franja de agua que separa los océanos de Estados Unidos y Canadá. Este tipo de experiencia cuesta unos 414 euros , y la principal ventaja es que normalmente podrá admirar las ballenas de cerca. Si quiere aumentar sus posibilidades de verlas, es aconsejable aprovechar la temporada de abril a octubre, cuando se ven más ballenas jorobadas .
9. Haz una parada en la Galería de Arte de Vancouver
Tu estancia en Vancouver es también una oportunidad para visitar la Galería de Arte de Vancouver y su exposición fotográfica con más de 11.000 obras de arte expuestas, entre ellas las colecciones de Emily Carr, una artista canadiense que se inspiró en los pueblos indígenas locales. Las entradas cuestan a partir de 20 euros, y se pueden comprar fácilmente por Internet. Fundada en 1931, , la Galería de Arte de Vancouver se ha convertido rápidamente en un lugar emblemático del arte canadiense, que ofrece programas para preservar el arte contemporáneo y, sobre todo, actos culturales para promover el interés cultural de la ciudad.
10. Descubra Gastown y el reloj de vapor
Gastownes un animado barrio, conocido por sus magníficos edificios victorianos y que ofrece un contraste entre espacios modernos y antiguos. Es un paseo interesante, ya que es la parte más antigua de la ciudad. También es la oportunidad perfecta para echar un vistazo al reloj de vapor, un icono local construido en 1977 que funciona con una máquina de vapor y da la hora cada quince minutos. Y si te gustan los misterios, nada mejor que el Tour de las Almas Perdidas de Gastown de Vancouver, una aventura teatralizada que te permite explorar el barrio mientras escuchas historias jamás contadas. Podrá visitar el hotel más antiguo de la ciudad, conocer el Gran Incendio, la epidemia de viruela y los casos más espeluznantes sin resolver.
11. Explore Robson Street, vaya de compras y pruebe la gastronomía local
Robson Street, también conocida como Robsonstrasse, es el lugar perfecto para ir de compras en Vancouver. Desde boutiques de lujo y tiendas vintage hasta cafés y mercados locales, ¡hay para todos los gustos! Si quieres probar la gastronomía local, te recomendamos que hagas una parada en el Mercado Público de Robson: la comida suele ser variada y encontrarás restaurantes de lujo que sirven platos asiáticos, canadienses, latinoamericanos, etc. Si prefieres comprar en un centro comercial, puedes dirigirte al Royal Centre, a sólo cinco minutos a pie.
12. Relájate en la playa de Kitsilano y date un chapuzón en la piscina de Kitsilano
La playa de K itsilano es una de las favoritas de Vancouver, sobre todo en verano. Está rodeada de tiendas vintage, puestos de comida étnica, zonas de barbacoa y mucho más. Puedes jugar al hockey playa, tomar clases de voley playa, hacer windsurf y skimboard, todas ellas opciones divertidas, sobre todo si vas con la familia o los amigos. La principal atracción es la piscina Kits al aire libre, donde podrá darse un chapuzón en el agua salada (abierta sólo de finales de mayo a septiembre).
13. Aire fresco en el Jardín Botánico de la Universidad de Columbia Británica
Fundado en 1916, el Jardín Botánico de la UBC es un lugar tranquilo situado en la Universidad de la Columbia Británica, en Vancouver. Aquí podrás admirar colecciones de magnolias y arces, así como explorar el ala del jardín asiático para hacer un interesante recorrido por la fitoterapia china. A pocos metros se encuentra el Jardín Nitobe, donde podrá presenciar una mítica ceremonia en una auténtica casa de té.
La entrada cuesta unos 4 euros. Además del jardín asiático y el jardín Nitobe, encontrará otras colecciones divididas en secciones (las plantas están agrupadas por especies y países de origen). En concreto, puede visitar
- El jardín contemporáneo.
- El jardín asiático.
- El jardín alpino.
- El jardín alimentario.
- Los jardines norteamericanos.
- El jardín del bosque de la Columbia Británica.
- El jardín forestal de Carolina.
- El jardín forestal.
- El jardín de la vertiente del Pacífico.
