OBSERVATORIO CANCANA
Cancana es un poco el observatorio del fin del mundo por su situación geografía, hundida en los meandros de los valles al sur de Vicuña, a los que se accede por las carreteras D -485 y a D -487. A la entrada de la aldea de Cochiguáz, a la izquierda, se ha pintado la cúpula y el observatorio desde el camino de tierra (¡y polvoriento!) principal. Las fiestas de observación propuestas son clásicas, con un primer enfoque del cielo desnudo (constelaciones, posiciones de los principales planetas), explicaciones sobre la mecánica celesta y luego observaciones bajo la cúpula con un telescopio de 355 mm de diámetro. La contaminación luminosa es casi inexistente en esta zona montañosa bastante alejada, sin precisar que se toma una pequeña bofetada al descubrir una Vía Láctea del sur especialmente luminosa y contrastada, durante las veladas sin Luna.