BOCADILLO ABDELMALIK
leer másEl Bocadillo de Abdelmalik es una de las bocadillerías más antiguas de Tánger y también una de las mejores. Brahim Abdelmalik está siempre allí y, con su equipo, rellena incansablemente medias baguettes con verduras crudas, carne, pollo, huevos y mayonesa. Las tortillas y las patatas fritas caseras también son un clásico. El ambiente popular y un poco alocado contribuye al encanto del local. Por la noche, algunas mesas se instalan en la acera, entre las hermosas fachadas blancas del centro de la ciudad, en esta concurrida calle mexicana.
LE SALON DE VIENNE
leer másUn buen lugar para los amantes del brunch y un desayuno muy copioso. Draperies pintadas en el techo, grandes sillas y bonita decoración. Una buena relación calidad-precio.
MISTER NOODLES
leer másUna dirección agradable y popular que recomendamos especialmente a quienes quieran cambiar de cuscús, tajines y otras especialidades magrebíes. Mister Noodles, sucursal tangerina de una marca muy conocida en el sur de España, es un bar de fideos con influencias tailandesas, malayas, japonesas y chinas. De postre, la fondue de chocolate hará las delicias de los más exigentes. Es una buena idea si se aloja en la zona o después de una sesión de sol en la playa cercana. Comida para llevar y reparto a domicilio.
SMASH & BUN
leer másEsta nueva dirección de la Corniche, con su decoración minimalista, ofrece excelentes hamburguesas aplastadas, al estilo de EE.UU. Aquí, el filete picado se aplasta mientras se cocina en una plancha caliente. El resultado: la hamburguesa tiene una corteza crujiente, casi caramelizada, y la carne se mantiene jugosa por dentro. Un menú ultracorto pero eficaz. Se puede elegir entre ternera y pollo. Todo es casero: los bollos son gorditos y húmedos, las salsas magistrales y las patatas fritas ultra crujientes. Un buen batido de fresa para bajarlo todo. Una cálida bienvenida.
MIX MAX
leer másAunque este snack bar se presenta como una pizzería sin pretensiones, también sirve chawarmas, hamburguesas, tacos y patatas fritas de calidad. A los jóvenes de Tánger les gusta reunirse allí a cualquier hora del día o de la noche. La gran sala de arriba, con sus mesas y sillas de madera, suele estar llena. El ambiente es sencillo, pero bien cuidado, con fotos en marcos originales de hierro forjado. Personal agradable y servicio eficaz. Es limpio, se puede comer en el local o para llevar por unos dirhams. No hay alcohol, pero sí refrescos.