YACIMIENTO ARQUEOLÓGICO DE DAORSON (ILIRSKI GRAD DAORSON)
Yacimiento arqueológico en el que destacan las imponentes murallas ciclópeas de la antigua ciudad de Daorson, de 4,5 m de ancho y más de 7 m de alto.
Se trata de la antigua ciudad iliria de Daorson, de la que sólo quedan imponentes muros de piedra. El sitio ofrece unas magníficas vistas del sur de Herzegovina y, yendo hacia él, permite descubrir la iglesia ortodoxa de San Pedro y San Pablo.
Historia – Entre el 300 y el 50 antes de nuestra era, la ciudad fue la capital de la tribu iliria helenizada de los daorsos, cuyo territorio se extendía desde la actual ciudad de Neum hasta los alrededores de Móstar. Dotada de una poderosa flota y aliada de los romanos, la ciudad fue devastada y abandonada durante la guerra contra los dálmatas, otra tribu iliria de la costa. Los daorsos encontraron entonces refugio en la isla de Vis (Croacia). El lugar nunca más volvió a estar habitado y fue objeto de saqueos repetidos. Los arqueólogos descubrieron numerosas ánforas, esculturas, monedas y un precioso casco de bronce con los símbolos de varias divinidades griegas.
Visita – Aún son visibles los vestigios de tres muros denominados ciclópeos. Están constituidos por enormes bloques de piedra, de 4,5 metros de anchura y más de 7 metros de altura. Comparables a los de la ciudad prehelénica de Micenas (Peloponeso, en Grecia), constituían el recinto fortificado de la acrópolis (ciudad alta) que estaba rodeada por barrios comerciales y residenciales. Algunos paneles en inglés jalonan la visita.
Iglesia de San Pedro y San Pablo (Crkva Svetih Petra i Pavla) – En la carretera que sube al yacimiento arqueológico, a 3,5 kilómetros al noroeste de Stolac, a la izquierda, junto a las últimas casas de la aldea de Ošanići, de difícil visita pues casi nunca está abierta. Fue construida en 1505 para acoger el cadáver del señor arumano Radoslav Hrabren-Miloradović. Renovada en el siglo XIX y, aunque fue perdonada durante el conflicto de 1992-1995, está bastante deteriorada por falta de mantenimiento. En la parte trasera se encuentra el antiguo cementerio donde se erigen las «sillas de los jueces» (Sudačke stolice), dos asientos tallados en la roca (el mayor mide 2,5 m de alto). Aquí es donde se impartía justicia bajo el reinado de los Hrabren-Miloradović. Y, según los habitantes, de ahí vendría el nombre de Stolac, «silla», stolica en bosnio