KONAK DE BISTRIK (KONAK NA BISTRIKU)

Actualmente convertido en residencia oficial de la Presidencia de Bosnia y Herzegovina, este konak («residencia» o «palacio» en turco) ha estado en el centro de grandes momentos de la historia del país desde hace un siglo y medio. Erigido entre 1861 y 1869, por orden de Topal Osman Pacha, entonces bey del vilayato de Bosnia y futuro gran visir del Imperio, es el cuarto y último saray (palacio de gobernadores) construido por los otomanos en la ciudad (el nombre de Sarajevo procede de saraj, la forma eslavizada del turco saray).

Historia

1878-1914. El 13 de julio de 1878, el Tratado de Berlín puso fin a cuatro siglos de dominación otomana y al caos en el que estaba sumido el país. Los representantes de las tres grandes comunidades se reunieron durante el verano en el konak de Bistrik para crear el primer gobierno nacional de Bosnia en julio de 1878. Este solo duró unos días, hasta la conquista de la ciudad por Josip Filipović, el 19 de agosto. A partir de entonces, el konak se utilizó como residencia de los gobernadores austro-húngaros del Reichsland de Bosnia y Herzegovina. El lugar también acogía regularmente a los Habsburgo cuando estaban de paso en la ciudad.

Junio de 1914. Allí fueron llevados Francisco Fernando y su esposa Sofía inmediatamente después de su asesinato, el 28 de junio de 1914, a 300 metros. La duquesa de Hohenburg, herida en el abdomen, ya estaba muerta cuando llegó hacia las 11 de la mañana. El archiduque, herido mortalmente por una bala en el cuello, falleció diez minutos después. Por la tarde se practicó la autopsia de los cuerpos. Más tarde, en la noche, se entregaron los ataúdes, los más lujosos que pudieron encontrar, y fueron requeridos con urgencia los servicios de dos escultores para que realizaran las máscaras mortuorias. En la madrugada del 29 de junio, después del embalsamiento, el arzobispo católico dijo una misa. Los dos ataúdes abiertos fueron expuestos durante toda la mañana. Después, los cuerpos dejaron el konak a las 17.30 h. Un cortejo fúnebre los llevó a la estación de Bistrik (cerrada en 1922, sigue visible a 600 m al norte del konak siguiendo la calle Bistrik) donde un tren los trasladó hasta el puerto de Metković (Croacia). Desde allí fueron transportados en el acorazado Viribus Unitis hasta Trieste y luego en tren a Viena, antes de ser inhumados el 4 de julio en el castillo de Artstetten, en Austria.

Desde 1918. Tras la guerra y el hundimiento del Imperio austrohúngaro, Bosnia se integró en el Reino Yugoslavo (1918-1941) y, posteriormente, en la República Federativa Socialista de Yugoslavia (1945-1992). A partir de entonces, el konak de Bistrik solo serviría para acoger a las altas personalidades políticas. El mariscal Tito se alojaba allí cada vez que estaba en Sarajevo. Ligeramente dañado durante el sitio de la ciudad, el konak volvió a tener un papel protagonista en la historia, cuando acogió la cumbre del 15 de julio de 2002, primera reunión oficial entre los representantes de Serbia, Croacia y Bosnia y Herzegovina, que marcó el inicio de un acercamiento de los ex-enemigos yugoslavos después de la guerra de 1992-1995.