CASTILLO TEMPLARIO

Lo podemos ver a lo lejos cuando llegamos a Tomar. Cuanto más te acercas a ella, más se manifiesta su forma. Este castillo medieval está situado en la Linha do Tejo, la línea defensiva del castillo construida desde Santarém para proteger la capital (Coimbra) de los moros en la época de la reconquista del Reino en el siglo XII por los cristianos. La construcción comenzó en 1160, al mismo tiempo que la Charola del Convento del Cristo y el Castillo de Almourol, cerca de Abrantes, bajo la dirección del Maestro Templario D. Gualdim Pais. Según los escritos históricos, el castillo de Tomar fue utilizado como refugio por los cristianos durante los seis días de los ataques del califa árabe Abu Yusuf Yaqub al-Mansur. Una placa cerca de la entrada de la iglesia conmemora esta victoria, y una puerta de la fortaleza fue nombrada "la puerta de la sangre". Este castillo fue residencia de la Infanta Henrique y Manuel I en el siglo XV, y luego de João III en el siglo XVI. La fortaleza militar combina los estilos romántico, gótico y renacentista, y está compuesta por un doble cinturón de murallas que delimitaba el primer pueblo y la plaza de armas. La primera muralla de forma pentagonal se llama alcáçova y se enriquece con la torre del homenaje, la Torre de Menagem, un tipo de construcción introducida por los templarios en el país. Se dice que la iglesia redonda del castillo (rotonda), al igual que algunas otras iglesias templarias de Europa, se construyó sobre el modelo de la mezquita de Omar en Jerusalén, que los cruzados creían erróneamente que era una reliquia del Templo de Salomón.