EUROSTARS HOTEL REAL * * * * *
Este majestuoso edificio fue construido en 1917 para acoger con dignidad a los visitantes del monarca Alfonso XIII. Como buen anfitrión, había ordenado también la construcción de un casino y un hipódromo. Elegante y blanco como un Carlton (de estilo neo-francés), este hotel de cinco estrellas, situado a dos kilómetros del centro de la ciudad, ha conservado los atributos del lujo supremo: en la planta baja, una brillante sucesión de salones y galerías decoradas con antiguos clichés de la familia real golpeando la pelota en la cancha. Arriba, 123 habitaciones igualmente propias de la realeza, con terrazas con vistas a la bahía de Santander. Si no quiere quedarse, puede tomar una copa o desayunar en la magnífica terraza del bar mientras disfruta del espectáculo del palmeral, las olas azules y las cumbres de la Cordillera Cantábrica. El último detalle para una estancia perfecta: este encantador lugar también dispone de un centro de talasoterapia.