ERMITA DE SAN JUAN DE GAZTELUGATXE

Está situada en el corazón del biotopo protegido de Gaztelugatxe, con una extensión de 158 hectáreas entre Bakio, al oeste, y el cabo de Matxitxako, en Bermeo, al este, desde donde la vista es impresionante. A lo largo de la costa acantilada se pueden ver dos islotes rocosos de color claro, accidentes geológicos poco frecuentes en la región. Es aquí, en lo alto del primer islote, el de Gaztelugatxe, donde se alza la sublime ermita de San Juan, a la que se accede mediante un puente y una interminable escalera de 231 escalones. La ruta se ha trazado como un Vía Crucis con catorce estaciones. La fundación de este lugar religioso se atribuye a los templarios. La leyenda dice que San Juan Bautista, quien desembarcó en Bermeo, llegó al islote en solo tres pasos, dejando una marca en cada uno de ellos. En el último, en la cima de la isla, se dice que ordenó la construcción de la ermita. Así, según la tradición, es costumbre tocar la campana de la capilla tres veces mientras se hace un voto después de la dura subida de las escaleras. Estos tres toques de campana se refieren, por supuesto, a las tres zancadas de San Juan Bautista.

Cada año, la gente de Bermeo acude en procesión e la ermita el día del solsticio de verano (24 de junio). Muchos curiosos también vienen a visitar el sitio, ya que fue uno de los escenarios de la serie Juego de Tronos.

Su leyenda, su magnífico emplazamiento lleno de misterio y el saber hacer de sus constructores hacen imprescindible la visita a esta célebre ermita.