Restaurante conocido por sus excelentes langos en un entorno histórico en el corazón del Bosque de la Ciudad de Budapest.
Los buenos lángos, esas famosas rosquillas redondas y planas que tanto gustan en Hungría, están lejos de estar disponibles en las calles Afortunadamente, se ha abierto un pabellón histórico renovado en medio del Bois-de-la-Ville, cerca de los baños Széchenyi. Sus lángos son increíblemente crujientes, digeribles y variados, elaborados con una buena quincena de ingredientes entre los que se encuentran el bacon, el salchichón, la salchicha, el jamón de Parma, la rúcula, el tomate, la aceituna, la cebolla... Incluso puedes probar la versión con júh turó: con queso fresco de cabra y eneldo (¡una delicia!). Para servir con jarabe.
So far this place is one of the top with Hungarian langos.