RUINAS DE SÃO PAULO
Este edificio, consagrado en 1603, era famoso por su belleza y recibió suntuosos regalos de los más grandes reyes de Europa
Las ruinas de la Iglesia de San Pablo son el lugar más emblemático de Macao, testimonio de la herencia cristiana de la ciudad. Construida entre 1602 y 1637 por los jesuitas con la ayuda de cristianos japoneses que huían de la persecución de Nagasaki, esta colegiata fue el "mayor monumento cristiano de Asia". Sirvió como oratorio del Colegio de San Pablo, abierto en 1594 para formar misioneros. Consagrada en 1603, era famosa por su belleza y recibió suntuosos regalos de reyes europeos. Personalidades como Matteo Ricci estudiaron chino aquí antes de ofrecer sus servicios a la corte Ming como astrólogos y matemáticos.
El incendio. En 1835, un terrible incendio arrasó la iglesia, dejando sólo su fachada y su monumental escalera. Se cree que el incendio se originó en las cocinas del Colegio de San Pablo, probablemente a causa de los fuegos artificiales utilizados para el Año Nuevo chino. Como la estructura es de madera, las llamas se propagaron rápidamente.
La fachada barroca está decorada con esculturas que representan símbolos cristianos y chinos. En el tercer nivel, se puede admirar una representación de María ascendiendo al cielo (la Asunción), rodeada de ángeles, así como flores simbólicas: la peonía para China y el crisantemo para Japón. Esta mezcla de símbolos atestigua el encuentro de culturas, con un dragón montado por la Virgen bajo el frontón. Hoy, la fachada está coronada por la cruz de Jerusalén, y los nichos inferiores albergan estatuas de bronce fundidas en Macao. Se puede entrar en el espacio vacío que una vez formó la iglesia, donde las ubicaciones de los pilares están marcadas en el suelo.
El Museo de Arte Sacro y Cripta se encuentra en la parte trasera de las ruinas (acceso gratuito). Ocupa el edificio que albergó el Colegio Saint-Paul. Este museo recorre la historia de la ciudad, destacando el impacto de la colonización portuguesa. Sus variadas exposiciones, que incluyen piezas arqueológicas, documentos históricos y objetos de arte, permiten al visitante comprender mejor la riqueza cultural de la región. Al fondo, en una refinada y magnífica cripta, se conservan las reliquias de mártires de Japón y Vietnam.
Las ruinas de São Paulo, restauradas en 1991, atraen a grandes multitudes, símbolo de la herencia cristiana de Macao, donde entre el 5 y el 10% de la población es cristiana. Las ruinas de São Paulo, que se erigen orgullosas en el centro histórico, son una visita obligada en cualquier viaje a Macao.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
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Opiniones de los miembros sobre RUINAS DE SÃO PAULO
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
Très beau vestiges de l'époque portugaise et en bon état.
Monument à voir à Macao