CROWNE PLAZA
El Crowne Plaza de Praga se construyó (en 1996) en lo que había sido el hotel del ejército desde 1953. De ahí su arquitectura soviética, de la que es un raro vestigio en Praga. Esta es su gran originalidad y su principal baza. El edificio recuerda al Palacio de la Cultura de Varsovia o a la Casa de la Prensa Libre de Bucarest. En la parte superior, la estrella sigue ahí, pero en verde. El estilo se repite en el interior, con grandes salas de recepción, escaleras monumentales, frescos y mucho más. La transformación es un verdadero éxito. El confort es el esperado. Su ubicación, entre la universidad y el barrio de las embajadas, no es precisamente cómoda para los turistas. Pero el centro sigue siendo fácilmente accesible, en taxi o transporte público.
Also eigentlich ganz ok.
Zimmer waren Sauber haben aber extrem nach Zitrone gerochen.(Denke die Putzmittel).
Das Frühstück war Top
Rührei/Spiegelei/gekochte Eier
3 unterschiedliche warme Würste.Und vieles mehr.
Es gibt sogar eine kleine Glutenfreie Ecke.
Die Sky-Loung ist auf alle fälle ein getränk bei nacht wert. Mega aussicht.
Was garnicht geht und deshalb nur 4 Sterne.
Das man 600kc für den Parkplatz zahlen muss.