VÍA MARANGU

Es el acceso más asequible para subir el Kilimanjaro, las noches se pasan en refugios y el ascenso es muy regular. Este ascenso progresivo permite descubrir todas las distintas fases de vegetación que se encuentran en la montaña, bajo latitudes ecuatoriales, y gracias a una humedad importante del macizo y a los numerosos ríos y cascadas, presentes hasta los 4.000 m. A las plantaciones de café y de plataneros de las estribaciones (de 800 a 1.800 m) les sigue la zona forestal (de 1.800 a 2.800 m) muy densa, poblada por grandes árboles, marañas de lianas, heveas…
Allí también encontrará más animales: monos, aves, camaleones, antílopes, aunque estos últimos se ven bastante menos. Al pasar los gigantes brezos, atravesará una zona de altas hierbas (de 2.800 a 4.000 m).
Descubrirá senecios gigantes y lobelias, y como lienzo de fondo, Kibo y sus glaciares nevados. Luego el paisaje se va volviendo más árido, los senderos del bosque en ocasiones embarrados van dejando paso a otros más pedregosos. La zona alpina se convierte enseguida en un desierto, los saltos de temperatura son enormes entre el día y la noche, y se empieza a notar la falta de oxígeno. Esta parte, la más cercana al Kibo y al Mawenzi, es la más espectacular y los paisajes son grandiosos. El sendero se ha equipado con refugios de estilo nórdico y paneles solares provenientes de donaciones escandinavas. Se le conoce vulgarmente como la Ruta de la Coca-Cola, por su afluencia y la relativa comodidad que ofrece.

Día 1 del ascenso. Marangu – Mandara. 7 km de ruta y 750 m de desnivel. Salida desde Marangu Gate, a 1.800 m de altitud. Durante el papeleo (declaraciones y pago de las tasas de parques), los porteadores se ocuparán de su equipo. Salida para unas 4 horas de ruta a través de un bosque denso y húmedo hasta Mandara Hut (2.750 m), el nombre de un respetado jefe chagga de la época de las primeras exploraciones. Si está en forma, se puede dar un paseo hasta el Maundi Crater, desde donde disfrutará de unas bonitas vistas a la llanura, al lago Jipe y, a lo lejos, a los parajes y las montañas Para y Usambara. La cena, por lo general caliente y copiosa, se sirve en el refugio, en un comedor que ocupa la planta bajo el gran dormitorio.

Día 2. Mandara – Horombo. 11 km para 1.000 m de ascenso. Salida hacia las 8 h. Caminará unos 45 minutos por el bosque antes de seguir a través de los brezales de altura. Tras unas 6 horas andando, se llega al segundo refugio, Horombo Hut, a 3.720 m. Los alpinistas pasan la noche en literas individuales en habitaciones de 4 personas.

Día 3. Horombo. Es muy recomendable hacer una etapa de aclimatación en Horombo, para lo cual lo mejor es hacer un viaje de ida y vuelta hasta los pies del Mawenzi, a 4.600 m. La ruta sale a unos cientos de metros del refugio, a la derecha hacia el norte y pasa delante de las Zebra Rocks; la filtración del agua ha creado hermosas estelas blancas en la roca negra. Antes de llegar al refugio de Mawenzi Hut, se puede disfrutar de unas bonitas vistas a la meseta (el gran asiento entre Kibo y Mawenzi) y a Kibo.

Día 4. Horombo – Kibo Hut. 10 km y 1.000 m de desnivel. 7 horas de ruta para hacer esta etapa, donde la vegetación, poco después de la última fuente de agua, va dejando hueco al desierto de altura. La atmósfera a esta altura es impresionante. El viento es el único que da vida a estos espacios inmensos y silenciosos. El refugio de Kibo (4.700 m), con paredes de piedra, ofrece a los alpinistas dormitorios de unas quince personas. Los porteadores se pararán aquí: para el ascenso final, cada uno coge su propia mochila y, eventualmente, puede confiarle un exceso de carga a su guía.

Día 5. Kibo Hut-Gillman's Point – Uhuru Peak-Horombo. Ascenso en 4 km y 1.200 m de desnivel, bajada en 14 km y 2.200 m de desnivel. El ascenso final tiene que empezar muy temprano durante la madrugada (alrededor de la 1 h), para que el terreno y luego la nieve estén firmes. En cualquier caso no se pierde mucho, ya que no podrá dormir de todas formas. Justo al pasar el refugio, un sendero bien marcado se alza en forma de Z. La pendiente es empinada y el suelo está lleno de escorias, en las que uno tiende a hundirse un poco. A 5.150 m, pasamos por delante de Hans Meyer Cave, una cueva donde acampaban los primeros en alcanzar esta cima. A finales del siglo XIX, no muy lejos de allí, fue hallado un leopardo de montaña, del que Hemingway habla en uno de sus libros, congelado en la nieve. En general, el frío es muy intenso. Después de 5 a 6 horas caminando, durante los primeros fulgores del alba, llegará a Gillman's Point (5.685 m), la antecima, en el borde de la meseta del cráter. Numerosos alpinistas se detienen en esta primera cima, mientras que lo que realmente vale la pena, tras un descanso de un cuarto de hora, es continuar por el borde sur, para alcanzar, en una hora y a 5.895 m de altitud, el Uhuru Peak, auténtica cima de África y colofón a todas sus penas. El descenso requiere de nuevo 1 hora para Gillman's Point, luego 2 horas para Kibo Hut, entre las escorias, y finalmente 2 horas para Horombo.

Día 6. Horombo – Hut – Marangu Hut. 18 km y 1.900 m de desnivel. Un descenso tranquilo aunque un poco largo hasta el punto de salida de la ruta, pasando por Mandara. Un consejo: pida a su guía que pase por las cascadas, un poco por arriba de Marangu; algunas, muy bonitas y que no entrañan peligro, permiten bañarse en parajes encantadores típicos del bosque ecuatorial.