ADEL-HALABI
leer másSumérgete en esta pequeña gárgola que, aunque no parece gran cosa, guarda algunas agradables sorpresas. El sonriente Adel ofrece sabrosos platos caseros tradicionales, así como sándwiches para los que tienen prisa. Por tres veces nada, puedes disfrutar del plato del día, un hummus y una ensalada. La sala, de tamaño reducido, sólo alberga cuatro mesas pintadas en verde laguna y la zona de la cocina donde Adel prepara los platos ante sus ojos. Al local le vendría bien un lavado de cara, pero la principal razón para venir es la cálida acogida del dueño y sus buenas recetas.
KIR HERES
leer másCon su elegante fachada, sus sillas y manteles en tono verde, sus decoraciones beduinas (alfombras, trajes tradicionales, cabezas de íbices nubios disecados...), uno puede sentir que el Kir Heres juega la carta turística al máximo. Sadam ha creado un ambiente agradable y confortable, y esto se refleja en sus precios. Aquí, el plato tiene el precio de una comida en las otras gargantas cercanas al castillo. Encontrará los platos tradicionales jordanos a los que está acostumbrado y algunos platos continentales.