MONASTERIO DE KLISURSKI (КЛИСУРСКИ МАНАСТИР)

Fundado en el siglo XIII, su arquitectura y sus muros blancos entre el verde de la naturaleza que lo rodea lo convierten en un lugar único. De hecho, ocupa el cuarto lugar por tamaño entre los monasterio del país. El iconostasio esculpido y los demás iconos son magníficos. El lugar invita al recogimiento y a la gratitud por estar allí. En la parte trasera del monasterio hay varias senderos que conectan con otros pueblos. Hay dos pequeños restaurantes abiertos desde el mediodía hasta las 20 h, a menudo con música tradicional de fondo.