Restaurante con un ambiente cálido que ofrece cocina casera con productos frescos.
Este restaurante está siempre lleno Un ambiente cálido, productos frescos y cocina casera lo convierten en un lugar apreciado por la mayoría de las personas que trabajan o viajan por la zona. El credo del chef Simon Chirent - casero, fresco, de calidad - está validado, ¡y se puede comer allí mismo o llevárselo! Vino por copas, bonita decoración, la sala es ruidosa, ¡pero esa es la prueba de que hay gente! La enorme terraza es agradable cuando hace buen tiempo. La propietaria, Isabelle Faure, ha tenido la buena idea de ofrecer sesiones afterwork, un lugar de encuentro que hacía mucha falta en la zona para tomar algo después del trabajo. Nos gusta la relación calidad/precio. ¡Un lugar precioso!