Altitud: 1.650 m. Población: 10.000 habitantes Distancia desde Addis Abeba: 590 km. Arba Minch, la puerta de entrada al Sur, marca el final de la red asfaltada, y es una buena idea reponer provisiones aquí si es necesario. La pista, recientemente consolidada, tarda entre dos y tres horas en llegar al pueblo de Konso, 88 km al Sur. Esta pequeña ciudad se desarrolló bajo el régimen comunista en la década de 1970. Es conocida sobre todo como un importante centro cultural, gracias en particular a los pueblos konso, ricos en tradiciones religiosas y culturales, así como en agricultura. Cada hectárea de esta vasta llanura ha sido desbrozada y dedicada a la agricultura. Los konso son ingeniosos. Las técnicas para limitar la escorrentía de las lluvias, combinadas con la mezcla de cultivos en un mismo campo, permiten optimizar el uso del agua de lluvia. Las escasas precipitaciones (550 mm al año), repartidas en dos temporadas cortas (febrero y septiembre), bastan para producir algodón, café, cereales (principalmente sorgo y maíz), legumbres (caupí, arveja) y tubérculos (incluida la mandioca). La principal fuente de hortalizas es la moringa, un árbol de tronco ligero omnipresente en el paisaje, cuyas hojas se comen hervidas como las espinacas.Lospueblos fortificados konso ( paletas), catalogados por la UNESCO. Están diseminados por toda la región, cubriendo una superficie de 55 km2, y fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2011. Se han construido a lo largo de veintiuna generaciones, ¡casi cuatrocientos años! También han sido incluidos en la lista por su cultura única, amenazada por el avance de la modernidad. Estos pueblos destacan por su notable arquitectura de terrazas de piedra y fortificaciones de varias murallas concéntricas, hasta seis barreras protectoras en algunos pueblos, cada vez más altas cuanto más te acercas al centro, de hasta 5 m de altura, erigidas por su valor estratégico y defensivo. Las moras, en el corazón de las aldeas fortificadas, siguen desempeñando un papel importante y central en la vida del país konso. Es aquí donde duermen los jóvenes de la aldea una vez alcanzada la pubertad y donde se desarrolla la vida social y local. Algunos pueblos fortificados tienen hasta diecisiete moras.Mercados. Aunque la mayoría de los habitantes de la aldea proceden del norte, los días de mercado, lunes y viernes, reúnen a konso, tsemaï y borana de Yavelo. Alrededor de los puestos de frutas y verduras, junto a la cerámica y los tejidos konso y algunas joyas de segunda mano, los pastores, con las armas al hombro, vienen a cambiar su ganado por cereales. Las mujeres, envueltas en tul negro, visten faldas de algodón crudo con varios volantes y se adornan con collares de perlas y pulseras de aluminio. Al igual que sus hijos, casi todos llevan camisetas cuyo estampado similar, visible en toda la región, hace pensar que proceden de una compra al por mayor o de la labor caritativa de misioneros que han venido a inculcar algunos principios de modestia en estas poblaciones paganas acostumbradas desde hace tiempo a vivir con el torso desnudo. Los konso aprovechan los días de mercado para reunirse en los pequeños establecimientos que bordean la plaza del mercado, donde se sirve cerveza de sorgo(chaka) en calabazas. Los lunes y jueves en Dokato hay un mercado bordeado por numerosos tedj bet, siendo los tedj más populares entre los comerciantes del norte.

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