VIA FERRATA DE LA DORIA

Una de las vías ferratas más difíciles de Francia, ¡reservada a los iniciados! Tras un agradable paseo de aproximación por la maleza, llegará a una pata de ganso. Desde allí, podrá ir a ver la cascada de Doria, con su encantador puentecito. A continuación, vuelva atrás y diríjase a la cueva de Carret. Esta casa troglodita está ahora abandonada, pero es a la vez la entrada a una enorme cueva y el punto de partida de la vía ferrata. La subida incluye una pendiente. Un sendero le llevará hasta el aparcamiento.