RESTAURANT DU GRAND BEC
El Grand Bec no culmina a 3.398 metros como el pico del mismo nombre, pero alcanza buena altura en nuestro aprecio. El hotel se encuentra a la entrada de la estación de tren, desde donde podrá llegar al centro en pocos minutos. Apreciamos su restaurante. El chef, Dominique, es el propietario de la restauración y pertenece a la Academia del Gusto y las tradiciones culinarias de Saboya. El menú incluye productos frescos y cocina casera: la emulsión de castaña con su tuile de beaufort y carvi, los samousesde bogavante espuma de jóvenes brotes, brochetas de Santiago mantequilla con azafrán, filetes de ternera. En cuanto al azúcar, un perfecto soufflé en el ron. Bonitos platos, un servicio agradable, una cálida bienvenida, una buena carta de vinos para un buen momento. Un lugar que merece la pena por una pausa gastronómica.
Dès le moment où j'ai franchi les portes de ce joyau caché, j'ai été accueilli avec chaleur et hospitalité, instaurant une expérience culinaire exquise. Le service était impeccable, avec un personnel attentif qui répondait à chaque besoin sans être intrusif.
Le menu offrait une gamme impressionnante de plats, chacun étant un chef-d'œuvre à part entière. Chaque bouchée était une célébration de saveurs, élaborée avec des ingrédients frais et une maîtrise de la finesse culinaire. Des hors-d'œuvre alléchants aux desserts décadents, chaque plat m'a laissé désirer davantage.