Dirección con una amplia terraza, donde los postres y las pizzas del chef ofrecen una excelente relación calidad-precio.
Una espaciosa terraza con una impresionante vista del Ródano y del puente de Groslée. Un hostal "les pieds dans l'eau" donde el chef Emmanuel Valin y su equipo nos ofrecen una mesa en un entorno paradisíaco, sobre todo en verano, cuando es hora de instalarse en la terraza antes o después de una partida de petanca mientras se toma un aperitivo. Con el apetito abierto, el menú a su vez ofrece algo para darse un festín: el foie gras del chef, el paté en croûte, las famosas ranas en perejil servidas con un dauphinois gratinado, sin olvidar los postres del chef. Otros placeres caseros son las pizzas. Adorable bienvenida y un servicio particularmente eficiente, incluso para las mesas grandes. Excelente relación calidad-precio en un entorno de ensueño
Il faut dire que le lieu est plutot agreable, meme si dejeuner sur la terrasse quand il fait chaud n'est pas si agreable a cause du auvent qui laisse passer la chaleur.
La cuisine est bonne et bien presentee, mais elle n'est pas tres originale et surtout les prix sont largement surevalues.
L'accueil est moyen et le service d'une lenteur exceptionnelle: 3h pour arriver au dessert, on n'a pas pris le cafe car c'etait deja l'heure du diner...