Situado en el barrio de Magny, el Italiano es bastante discreto a primera vista. Su terraza goza de unas bonitas vistas a la iglesia de San Martín, que se encuentra justo al lado. En realidad, el restaurante es conocido sobre todo por los habitantes de los alrededores, que ya tienen sus modestos hábitos. Hay que decir que una vez probadas los platos sabrosos que el establecimiento sirve, se convierte rápidamente en uno de nuestros lugares favoritos, ideal en cualquier ocasión. El chef propone ensaladas, pizzas y pasta casera. Se prestará especial atención a la pasta de la primavera (champiñones, ajo, cebollas, espinacas, tomates, largadeña, vino, crema) y al Coco Nimp'izza, una mezcla de todas las pizzas a base de carne, para los muy (muy) grandes. La carta de vinos que acompaña a la comida es variada: incluye unos veinte vinos italianos y franceses (rojos, rosados, blancos de aguja), a consumir en botellas o en medio. Para los postres, mención especial al helado casero: un pequeño rincón del paraíso para los golosos que, el tiempo de una, tres o cuatro (¡estar locos!), se encuentran en el ambiente cálido de Italia, un día de verano y de descanso.
Restaurant excellent, je mâche pas mes mots, il fait parti pour moi d'un des meilleurs restaurant de Metz.
Je recommande vivement et fortement
Service cuisine et personnel au top !