ABRIS DU KRONPRINZ
A la salida del pueblo de Varennes en dirección al emplazamiento de Haute Chevauchée, estos refugios en el sotobosque y en las contrafuertes se establecieron a finales de 1914, a dos kilómetros de las líneas del frente. Los generales y oficiales del estado mayor alemán establecieron allí su puesto de mando de avanzada, bajo las órdenes del general Kronprintz Rupprecht de Baviera a cargo del sector de Argonne. Reforzando una posición estratégica ya bien establecida, estos veinte o más refugios de hormigón armado estaban además conectados por una vasta y profunda red de mangueras de tráfico cubiertas con rejillas y alambre de púas. Su techo enterrado, compuesto de varias capas protectoras de 6 m de espesor y rieles y durmientes metálicos reventados, podía soportar proyectiles de gran calibre. La elección del lugar fue muy juiciosa ya que los alemanes habían fortificado una posición naturalmente fuerte, en el sotobosque y en una contra-pendiente. Lo más destacable es probablemente su equipamiento interior: generadores, estufas bávaras, baños con agua caliente, habitaciones paneladas, rico mobiliario con armarios repletos de vinos de La Habana, aguardiente y cigarros... lejos de un refugio improvisado, es un escenario lujoso y bastante alejado de la línea del frente que los soldados americanos de la 77ª U.S. descubrieron cuando entraron en el fuerte. La mayor parte de esta disposición interior ha desaparecido en gran parte durante el último siglo. Lo que queda son las estructuras masivas.