Un pequeño restaurante asiático situado en el corazón de Viroflay, un poco más que un tratador clásico, ha tocado el mapa de la modernidad, en un entorno luminoso de madera y piedra. Recibidos por una joven pareja discreta y agradable, uno se regala una comida con acentos chinos o tailandeses, servido en la mesa o tomada para llevar. En el plato, una selección de platos sabrosos reconocidos por su frescura: nems, dim sum o ensaladas abren el apetito. En el plato, apreciamos el pollo con curry amarillo, con hilados: jengibre, litronela, cacahuetes asados y leche de coco nos llevan al sudeste asiático. En postre, además de la ineludible perla de coco, también decretada con chocolate, podrás saborear el tapioca con leche de coco y su cama de mango, o el pastel de té verde salcha. Ideal para una comida en el pulgar.
Je vous le recommande vivement sans hésitation c’est de loin les meilleurs.
Nous nous sommes régalés et il nous en reste même pour un autre repas (quel plaisir ????)