MUSEO DEL AIRE Y EL ESPACIO
Cómo llegar y contactar
El museo aeronáutico más antiguo del mundo, situado en los terrenos del aeropuerto de París-Le Bourget, a pocos minutos de París
Fundado en 1919, es el museo aeronáutico más antiguo del mundo y uno de los más prestigiosos. Establecido en 1975 en el emplazamiento del aeropuerto de Le Bourget, sus colecciones han ido creciendo a lo largo de los años y ahora abarcan toda la historia de la aviación francesa e internacional. Desde la histórica terminal -lujosamente renovada- hasta la pista, entre las aeronaves expuestas se encuentran las primeras máquinas voladoras de finales del siglo XIX, cápsulas espaciales, aviones militares, helicópteros, etc. Entre las piezas emblemáticas, ocupa un lugar especial el Concorde: el primer avión supersónico comercial que sigue atrayendo a grandes multitudes. Otros gigantes son el Boeing 747, que se puede visitar, y el A380, que naturalmente encontró aquí su lugar. También se organizan exposiciones periódicas. Y para que los más jóvenes se familiaricen con el museo de forma lúdica, el museo ha creado un espacio de educación y entretenimiento, "Planète Pilote", dedicado a los niños de 6 a 12 años. Poniéndose en la piel de un piloto o de un astronauta, los más pequeños comprenderán mejor los distintos mecanismos físicos del vuelo y la propulsión. Por último, el planetario le invita a viajar entre las estrellas: desde la comodidad de su asiento, descubra los fabulosos misterios de nuestro universo. El recinto es también escenario de numerosos eventos, como el Salón Internacional de la Aeronáutica y el Espacio, que se celebra aquí cada dos años en junio, y Ciné Tarmac en verano
Este establecimiento también figura como :
J'ai jamais vu un musée aussi prenant.
J'ai passé une demi journée et je n'ai pas tout vu !
Il y a des choses intéressantes, comme la visite des Concorde, certaines mises en scènes, et les visites guidées. Mais ce musée manque cruellement d'interactivité, et peut ennuyer les plus jeunes ou ceux qui n'aiment pas trop les musées. Il peut paraître également austère.
J'étais heureux d'y aller gratuitement pour cet évènement, et j'aurai été déçu d'avoir payé les prix habituels, un peu chers pour ce que le musée propose. De plus, le parking est payant.
A part l'extraordinaire visite des 2 Concordes exposés + la très belle scénographie du hall spatial ... Le reste du musée est plus que vieillissant ... Quelle tristesse !!!
La palme de la médiocrité revient au planétarium ... à fuir !!!
J'ajoute que ce musée est catastrophique d'accès, et finalement très cher ...
Un gros effort de mise en scene s'impose !!!
Une visite incontournables pour les enfants.
Les avions ça marche à tous les coups!
A éviter aux alentours du salon de l'aviation car moins de modèles exposés