HÔTEL LANCASTER * * * * *
Cómo llegar y contactar
Un hotel con una elegancia preservada que ofrece habitaciones y suites con una enorme decoración, una línea de tratamientos orgánicos adaptados a todos.
El creador de este hotel, Émile Wolf, ha acumulado más de 1.000 piezas antiguas y ha convertido en este antiguo hotel particular del siglo XIX uno de los joyones de la hostelería parisina. El lujoso establecimiento ha sido completamente renovado, pero el toque de modernidad no le ha retirado su elegancia. Helmut Newton llevó a cabo en el Lancaster una serie de fotos en 1976, Marlene Dietrich se alojó más de tres años en lo que se convertirá en la suite presidencial, al igual que el pintor ruso Boris Pastoukhoff que dio su nombre a una suite. En la planta baja, el salón y el comedor tienen líneas más contemporáneas y el patio interior se ha transformado en jardín zen. Las habitaciones y suites son inmensas. Están decoradas con bonitos tejidos que son reediciones de tejidos antiguos, muebles antiguos y cuadros de maestros. Una parte de los cuartos de baño combina mármol gris y madera de iroko. La grifería, las toalleras calefactoras y los accesorios son de estilo retro. La línea de cuidados "Korres" es exclusivamente ecológica y adaptada a todo el mundo. Dan ganas de pasar horas, pero para relajarse hay la sauna instalada en la última planta junto a la sala de fitness, muy luminosa. El restaurante La Table du Lancaster ofrece viajes gustativos a través de la cocina de Julien Roucheteau.
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